El Cepo Cambiario es una realidad que golpea a los argentinos. Una decisión tomada por la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner a los fines de palear la crisis económica del país rioplatense.
Realidad relativa, si seguimos los conceptos de la misma Fernández, que aún hasta el día de hoy, asegura que lo de la crisis es un invento de la prensa opositora. Y de la población, sobre todo de clase media.
Otro ejemplo de que la visión de Cristina difiere de la realidad del resto, es el caso de las estadísticas del INDEC, que niegan la inflación. Una confrontación como la de la entidad Consumidores Libres, es sólo una parte de la distorsión.
Hablar de Cepo Cambiario, es aportar más casos de la verborragia de la presidenta. En su visita a la Universidad Harvard, ocurrida a finales de septiembre, fueron muchas las preguntas disparadas por los alumnos argentinos.
“No existe el Cepo Cambiario”
En una rueda de prensa destinada particularmente a los jóvenes oriundos de distintas provincias de ese país, Cristina respondió como pudo audaces y filosas cuestiones: la re-relección, el incremento de su patrimonio personal, y el denominado Cepo Cambiario.
A grandes rasgos, en Argentina, para poder comprar dólares, se deben cumplir ciertos requisitos, que muchas veces no es posible conseguir. Además, quien utilice la moneda americana en tarjetas de crédito, debe abonar un porcentaje de incremento.
Sin embargo, según la mandataria argentina, todo es un invento:
«Muchos no tienen cómo justificar la plata para comprar dólares. No hay cepo cambiario. Si necesitás dólares, en el mercado hay 120 conceptos para comprar. El cepo cambiario es un título mediático».
“Córtenla con eso”, habría insistido la Jefa de Estado, ante la insistencia de los medios. Y aseguró que existen más de 300 conceptos para comprar dólares en bancos y casas de cambio.
Así como también informó que esta moneda ha sido utilizada sobre todo para pagar importaciones, deudas, viajes, servicios profesionales, entre otros.
Insisto, la realidad de la Presidenta, no es la misma que la de los argentinos que tiene el deber de dirigir. Y si no existe el cepo, el dólar es accesible sólo para aquellos…. Que no necesitan luchar por ellos, quizás porque tienen el capital necesario, o una cuenta en el exterior.
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