Gracias a las cooperativas de vivienda en Uruguay es posible acceder a una crédito hipotecario con múltiples beneficios, lo que las convierte en una de las mejores opciones para tener casa propia.
¿Cómo funcionan las cooperativas de vivienda?
Se trata básicamente de sociedades que buscan beneficiar a sus miembros mediante los aportes que se han hecho de manera conjunta, lo que a su vez les permite acceder a facilidades crediticias que de manera individual serían muy difíciles de conseguir.
En la gran mayoría de casos se busca obtener el máximo beneficio mediante la construcción de vivienda en lugar de comprarla nueva, lo que reduce los costos para los socios de la cooperativa.
Sin embargo, es muy importante escoger la cooperativa adecuada teniendo en cuenta no solo los beneficios, sino también las obligaciones y requisitos de la misma, pues a diferencia de un crédito hipotecario con un banco, no se entra como cliente, sino como socio.
Requisitos para el préstamo hipotecario con una cooperativa
En primer lugar, el número mínimo de socios para solicitar un crédito debe ser de 10 para construcción y de 6 para reciclaje. Adicionalmente, es importante que la cooperativa ya tenga un terreno aprobado por la ANV, al igual que el proyecto arquitectónico a desarrollar.
Con respecto a los titulares que optarán por el crédito, no deben ser propietarios de vivienda y el ingreso líquido (el restante después del pago de prestaciones de ley) de sus núcleos familiares no puede superar las 60 UR.
En promedio el plazo máximo es de 25 años con una tasa de interés anual del 5% en UR. Sin embargo, la dependiendo del tipo de cooperativa puede exigirse o no un ahorro previo del 15%. Para poder solicitar un préstamo hipotecario sin necesidad de este ahorro las alternativas más recomendables son las cooperativas de vivienda por ayuda mutua.
Fuentes: MVOTMA, Ley 13.728.
Imagen cortesía de woodleywonderworks (Flickr.com), licencia CC BY 2.0