Contar con tarjetas adicionales es un trámite sencillo pero personalizado. La entidad bancaria o crediticia donde se haya gestionado la tarjeta MasterCard es el punto de partida para sumar una o varias extensiones de la misma.
Actualmente es necesario contar con cierta libertad o independencia económica, ante ello suele ser necesario en un núcleo familiar, tener extensiones de la tarjeta de crédito del titular de la misma y, de esta manera, evitar dependencia al momento de necesitar realizar una compra con las ventajas que ofreciera la entidad emisora o la empresa MasterCard.
Requisitos
Cada empresa crediticia o banco es el encargado de realizar, con los requisitos que dispongan, el trámite para la obtención de una extensión de tu tarjeta MasterCard. La misma se puede obtener en el mismo momento que se hacen los papeleos necesarios para obtener la tarjeta titular, allí es necesario la cédula de identidad vigente junto con el formulario que se requiere para adosar a toda la documentación.
También se puede pedir una adicional en cualquier otro momento, allí también deberá ir el titular de la tarjeta para firmar aceptando la extensión de su ‘plástico’.
Beneficios
Cada tarjeta adicional cuenta con los mismos beneficios que la titular de la cuenta, pudiendo aprovechar descuentos y promociones que los comercios o entidades realicen con el banco emisor o la propia empresa MasterCard. Todos los gastos vienen en un único resumen, con el detalle de los gastos generados por cada una de las tarjetas existentes en la cuenta.
En materia de límite, es siempre el otorgado en el momento de la apertura, por lo cual cada gasto realizado por alguna de las tarjetas, ya sea la titular o una extensión, van descontando el importe a gastar por todos lo que están incluidos en la cuenta que engloba a las adicionales y la tarjeta titular.
FUENTE: MasterConsultas – Creditarjetas